Saltar al contenido

Cuarenta años de FEVIC (1977-2017)

Logo de FEVIC.

El domingo 24 de julio de 1977 se reunieron en el auditórium de la Cámara de Comercio de Puerto Cabello, estado Carabobo, representantes de instituciones de personas ciegas y de baja visión, para efectuar la Cuarta Convención Nacional de Ciegos de Venezuela. El encuentro fue convocado por un comité organizador constituido al efecto para formar una institución de segundo grado que asumiera la defensa e intereses de las personas con discapacidad visual, hasta entonces a cargo de la Sociedad Amigos de los Ciegos (SAC), pero únicamente para asuntos protocolares, en la cual no había ninguna persona ciega. Hacía falta una institución de peso integrada por quienes les correspondía ocuparse de sus intereses a nivel nacional e internacional.

Sus impulsores principales fueron el abogado y letrado Héctor Morillo (Zulia) y el señor Lucio Solórzano (Yaracuy), quienes planificaron su creación en Maracaibo, donde se habían efectuado las tres convenciones anteriores. Concurrieron a la cita:

Enlace afiliado: encuentra juegos en braille en Amazon.


  • Félix Antonio Quevedo, Cirilo Reyes, Elvia Camacho de Reyes e Irma Camacho de Isea, por la Asociación Falconiana de Ciegos, para ese entonces en Coro, ahora en Punto Fijo.
  • Eduardo Sánchez, por la Asociación Portugueseña de Ciegos, en Guanare, ahora Asociación Portugueseña de Personas con Discapacidad Visual, en Acarigua.

  • El locutor y publicista Luis Saúl Dugarte y el sonidista José Ramón Barrios, por la Asociación Zuliana de Ciegos, de Maracaibo.

  • Benigno Barboza, Antonio María García y Luis María Padrón, por la Sociedad Carabobeña de Ciegos Trabajadores, en Puerto Cabello, hoy Sociedad Carabobeña de Ciegos y Deficientes Visuales (SOCACIDEVI), en Valencia.

  • El abogado Ramón Flores, por la Sociedad Venezolana de Ciegos Trabajadores, Caracas.

  • Lucio Solórzano, Juan Evangelista Herrera y Juan Ramón Guedes, por la Sociedad Yaracuyana de Ciegos, en San Felipe, hoy Asociación Civil Yaracuyana de Ciegos, en Cocorote.

  • Pedro Vicente Mujica, por la Unión Guariqueña de Ciegos, San Juan de los Morros.

  • El doctor Héctor Morillo, el educador y abogado Ángel González, la profesora Gladys Morillo de Montero y la profesora Robertina Pérez de González, por el Consejo Panamericano Pro Ciegos, Maracaibo.

  • Por los ciegos independientes el publicista Agustín Monje, quien luego se afilió a la Asociación Nacional de Ciegos de Venezuela (ANCIVE), en Caracas.

Se acordó como única resolución de la convención la fundación de la Federación Venezolana de Instituciones de Ciegos (FEVIC). Se aprobaron como grandes objetivos: el desarrollo integral, la superación sociocultural, la unificación del movimiento tiflológico nacional, y la equiparación jurídica y económica de las personas ciegas y de baja visión.

El primer comité ejecutivo lo integraron: Presidente, Benigno Barboza, Carabobo; Secretario General, Lucio Solórzano, Yaracuy; Secretario de Finanzas, Cirilo Reyes, Falcón; Secretaria de Educación, Robertina Pérez, Maracaibo; Secretario de Acción Social, Ramón Flores, Caracas; Secretaria de Asuntos Femeninos, Gladys Morillo, Maracaibo; y Vocal, Pedro Vicente Mujica, Guárico. Sesionaría por dos años hasta que en el 2009 se aumentó el período a cuatro años.

La federación asumió la organización de las convenciones nacionales de ciegos, denominadas posteriormente Convención Nacional de Personas con Discapacidad Visual. En 1979 introdujo ante el Congreso Nacional el proyecto de Ley Sobre los Derechos del Ciego y el Deficiente Visual, que las cámaras legislativas tardaron casi diez años en rechazar y recomendaron la elaboración de un proyecto que incluyera todas las discapacidades. A partir de 1980 confrontó un período de decadencia por una dirigencia deficiente y una indiferencia general, que dificultó el acercamiento interinstitucional.

En 1985, bajo la presidencia del doctor Héctor Morillo, tomó el camino correcto y con la incorporación en 1987 de la encuadernadora, locutora y publicista Gloria Peniza, comenzó a funcionar como la máxima institución tiflológica del país. En 1986 creó la comisión nacional del cincuentenario de la educación de ciegos de Venezuela (CONCECIVE) con representantes de instituciones afiliadas y no afiliadas, con autonomía propia, la cual demostró a la nación el alto grado de madurez en la organización y realización de actos trascendentes para celebrar la iniciación y desarrollo de la tifloeducación en nuestro país.

El domingo 4 de enero de 1987, con treinta personas ciegas y deficientes visuales y tres de visión normal, tomó por asalto a las 8 de la noche las instalaciones del recordado Instituto Venezolano de Ciegos (IVC) con el único fin de devolver a los niños ciegos su Escuela, construida especialmente para ellos con la colaboración del pueblo y del Gobierno. A tal efecto, el 30 de abril del mismo año el Juzgado Cuarto de Primera Instancia en lo Civil de la Circunscripción Judicial del Distrito Federal y Estado Miranda, a cargo del Doctor Alirio Abreu Bureli, una sentencia mediante la cual “la Escuela de niños ciegos debe retornar a su sede natural”. Pero negociaciones de sindicatos e intereses particulares de autoridades educacionales influyentes impidieron el cumplimiento del mandato judicial.

Con su afiliación a la Unión Latinoamericana de Ciegos (ULAC) en 1985 FEVIC pasó a ser la genuina representante de las personas con discapacidad visual venezolanas a nivel internacional, por cuanto ULAC es capítulo de la Unión Mundial de Ciegos (UMC). En 1989 introdujo ante el Congreso Nacional el proyecto de Ley orgánica de protección e integración de las Personas con Limitaciones, que los legisladores modificaron y promulgaron como Ley para la Integración de las Personas Incapacitadas, cuyo sólo nombre la hizo inaplicable, que fue sustituida en 2005 por la Ley para Personas con Discapacidad, a la que no se le aprobó su reglamento. A partir del 2015, se comenzó a elaborar un proyecto de Ley Orgánica.

En 1990 coadyuvó a la constitución de la Confederación Venezolana de Personas con Limitaciones (CODEFEL), la cual no llegó a funcionar. En 1992 fue sede del Primer Congreso Andino de Personas Ciegas. El 24 de julio de 1994 inauguró el Servicio Nacional del Libro Hablado y confió su dirección a la Fundación Mevorah Florentín. El 30 de enero de 1995 fundó el Consejo Venezolano del Braille. En 1997 fue escenario del Primer Festival de Canto de Personas Ciegas del Área Andina.

En el 2002 fue dotada de material tiflotécnico por la Fundación ONCE para América Latina (FOAL). En el 2005, a fin de no perder su afiliación con la Unión Mundial de Ciegos y Unión Latinoamericana de Ciegos, comenzó a traducir documentos con profesores de la Universidad Central de Venezuela. En 2007 quiso mantener La Red Social creada por la ONCE, pero por razones económicas la pasó a la UCV.

A partir del 2008 comenzó a tener períodos de bajo y mediano rendimiento, que han traído como consecuencia la disminución de espacios en su ámbito de acción. Sin embargo, ha llegado al cuadragésimo aniversario de su creación y “sigue siendo una organización promotora, defensora y protectora de los derechos humanos, primordialmente de las personas con discapacidad visual; propiciadora de la cultura de paz y por tanto sustenta y orienta su actuación en los principios universales como el respeto, la solidaridad, tolerancia, equidad, transparencia y responsabilidad”, según expresiones de sus dirigentes.

Nota: Este artículo fue publicado en Signo Generador, órgano Divulgativo del Consejo Venezolano del Braille, año 16, número 18, agosto 2017.


¿Te gustó este artículo? En Ciegos Venezuela te agradecemos que nos lo hagas saber compartiéndolo por tus redes sociales, para lo cual encontrarás enlaces más abajo. De esta manera sencilla ayudas a dar a conocer nuestro trabajo. Son bienvenidos también todos los comentarios, en los cuales puedes dejarnos información adicional, opiniones, sugerencias o correcciones.

Enlaces afiliados

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.